martes, 5 de enero de 2016

Cerro Negro Nicaragua,León emocionante aventura.

El Cerro Negro es un volcán ubicado en el departamento de León, Nicaragua, a 25 kilómetros al este de la cabecera departamental del mismo nombre y tiene 726 metros de altura sobre el nivel del mar. Su nombre proviene de su color; y surgió hace un siglo y medio al ras de la llanura.


  • Nacimiento
Nació en la madrugada del 13 de abril de 1850, siendo uno de los más recientes partos de la historia volcánica del planeta, en medio de temblores, ruidos subterráneos, y proyecciones de lava. Es uno de los pocos volcanes históricos del mundo, como el Izalco en El Salvador y el Paricutín en México, pues la mayoría surgió en la prehistoria. En dos semanas alcanzó unos 50 metros de altura y en erupciones posteriores se caracterizó por la apertura de conos adventicios o grietas por donde fluyeron corrientes de lava; el cráter volcánico se caracterizó por una espesa nube de piroclastos de 6 kilómetros de altura que descargó una lluvia de cenizas al occidente, castigando principalmente a la ciudad de León.
  • Erupciones
El Cerro Negro ha tenido 23 erupciones en total –las últimas muy violentas incluyendo la primera– en 1867, 1914, 1923, 1947, 1946, 1950, 1968, 1971, 1992, 1995 y 1999; en la de julio y agosto de 1947 estuvo en erupción dos semanas y era tal la lluvia de ceniza sobre León que hasta se acumulaba en las calles, techos de tejas de las casas y la azotea de la Catedral; no se podía respirar por lo que el obispo Isidro Augusto Oviedo y Reyes le prometió a la Virgen María que se celebraría la Gritería de Penitencia o Chiquita, llamada así para no confundirla con la del 7 de diciembre, la noche del 14 de agosto de cada año (víspera de la fiesta de la Asunción de la Virgen), para que se calmara el volcán.

En noviembre y diciembre de 1995 ofreció un gran espectáculo lanzando curtidores de lava desde la cumbre; más recientemente en agosto de 1999 brotaron tres cráteres adventicios en las faldas del volcán arrojando lava y ceniza. De continuar estas erupciones en forma tan repetida y violenta llegará al cabo de pocos siglos a levantar su cabeza por encima de todos los otros volcanes vecinos.
El Cerro Negro, un volcán joven y único, es básicamente una colina negra y sin vegetación, con laderas bastante empinadas. Sobre el volcán y sus alrededores hay una capa de cenizas y rocas volcánicas que le dan su color. La erupción ocurrida en 1999 le dejó un borde negro con material volcánico alrededor, y dos pequeños cráteres al lado que también se acaban de formar.

Escalar el Cerro Negro no es como escalar cualquier otro volcán en Nicaragua. Éste solo tiene unos 500 metros de altura (son 726 msnm), pero la subida es empinada y difícil. Hay una especie de camino natural para subir, que lo facilita, pero hay otros lugares donde el visitante debe ayudarse de sus pies y manos para lograr subir. Al escalar, pude sentir las rocas caer, y toma alrededor de una hora subir hasta el cráter.


La vista desde la cima es magnífica. Se puede apreciar la cadena volcánica que atraviesa varios departamentos de Nicaragua y que alinea un volcán tras el otro, como el Telica y el San Cristobal. En la cima podrá también apreciar el cráter, sentir el calor y percibir el olor a azufre antes de empezar a bajar, actividad que es una aventura por sí misma.

Descender es mucho más fácil que ascender, ya que en una de las laderas más inclinadas hay solamente arena volcánica y se puede correr hasta abajo y llegar en sólo diez minutos. La sensación de correr es tremenda, pero no es necesaria, pues también se puede bajar tranquilamente y aprovechar para apreciar el panorama. Una alternativa más para descender es para las personas que tengan experiencia con tablas de nieve o arena para bajar la montaña. Como se puede ver, el volcán ofrece una experiencia única que puede ser disfrutada por cualquier en buena forma.





1 comentario: